Los coloridos estanques y lagos en Fukushima conocidos como Goshikinuma, se crearon cuando el Monte Bandai entró en erupción hace más de un siglo. Influenciados por los elementos volcánicos y minerales, cada cuerpo de agua tiene su propio color distintivo, estos matices son intensificados por el cambio de estaciones y puede cambiar dependiendo de la época.
Se pueden alquilar botes de remos en el estanque más grande Bishamon-numa y se puede ver un gran número de carpas europeas nadando. ¡Asegúrese de estar atento a las raras especies de carpas con manchas en forma de corazón en el costado las cuales se cree que traen buena suerte!
Desde la erupción volcánica, Goshikinuma se ha convertido en un popular destino turístico.
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