"Monkey Park Iwatayama" en Kioto

No mires fijamente a los ojos de los monos.

Esta es la recomendación antes de visitar el parque de monos en Kioto: una ladera en la montaña donde caminé entre monos salvajes, como un visitante más en su hogar. Después de escuchar sobre “Monkey Park Iwatayama” (a veces tiene “Arashiyama” en el nombre), fue una atracción que tuve que ver mientras estuve en Kioto en abril.

El parque está ubicado en Arashiyama, una de las zonas turísticas más concurridas de Kioto, y es fácilmente accesible en tren. Cuenta con unos 120 macacos japoneses, también llamados "monos de nieve". Son nativos de Japón y, sí, este es el tipo de monos que se ven en las fotos icónicas en las que se bañan en aguas termales en invierno.

Aunque los monos son alimentados por humanos (incluso los turistas tienen la oportunidad de hacerlo), todavía son salvajes, asegura el parque. Sin embargo, se deben seguir las advertencias de "no mires" y no toques, pero presencié que los monos más amistosos se acercaban a pocos centímetros de los visitantes.

El tiempo total de viaje desde la estación de Kioto varía de 35 a 55 minutos, según el transporte que utilices. La entrada al parque se encuentra a pocos pasos de la base de la montaña Iwatayama. Vi un pequeño letrero después de cruzar el río Oi.

Al entrar en el parque, inmediatamente vi a un mono trepando en la hierba a pocos metros. No había visto a este animal en ningún lado excepto en un zoológico. Al principio, estar tan cerca daba un poco de nervios, pero también era refrescante ver a estas criaturas fuera de una jaula de cristal. Los monos más activos se balanceaban de las ramas de los árboles y corrían por la ladera de la montaña. La caminata en sí es bastante fácil y toma alrededor de 30 minutos.

Siguiendo el camino, en la parte superior hay una vista de la ciudad, las montañas y el río, con un cielo azul brillante que cubre todo el paisaje en un día soleado. Después de admirar la vista (Japón realmente te enerva la expectativa —y no decepcionó— de esa "vista"), existe la posibilidad de alimentar a los monos.

Los monos están ansiosos por engullir trozos de manzana que los turistas pueden comprar y ofrecerles a través de la seguridad de un área cerrada. Toman la comida directamente de tu mano, ya que cuelgan en el exterior del área de la ventana enjaulada.

Una visita dura entre 1 y 2 horas, y los visitantes pueden ingresar de 9 a.m. a 4:30 p.m. / 5 p.m. del 15 de marzo al 30 de septiembre. En los períodos de otoño e invierno, el parque está abierto de 9 am a 4 pm, mientras que la cima de la montaña está abierta de 9 am a 4:30 pm.